2030: Las empresas ya trabajan para conseguir un mundo más sostenible
El mundo se enfrenta a multitud de desafíos. Un total de 767 millones de personas viven por debajo del umbral de la pobreza extrema. Dos mil millones de personas viven en países con escasez de agua. También es necesario reducir la contaminación urbana, ya que 9 de cada 10 personas residentes en ciudades han respirado aire que no cumple con los valores de las directrices de la calidad del aire de la Organización Mundial de la Salud. Además, uno de cada diez niños en el mundo trabaja. ¿Qué puede hacer la Agenda 2030?
“Es fundamental, asimismo, acabar con la diferencia salarial de género, que permanece en el 23% a escala mundial, y frenar el calentamiento del planeta, que continuó avanzando en 2016 hasta establecer un récord de 1,1 grados centígrados por encima del período preindustrial”, señala un informe titulado Las empresas españolas ante la Agenda 2030, en el que han colaborado diferentes asociaciones y compañías con CEOE.
Además, en el caso de España los retos también requieren soluciones urgentes, como es el caso de los 7,7 millones de alimentos que se desperdician anualmente. También es necesario reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, que han aumentado un 16,7% en el período comprendido entre 1990 y 2015, es imprescindible aumentar el gasto en I+D+i, donde la inversión es un 10% inferior a la media de la Unión Europea, y se necesita reducir el desempleo juvenil, que se sitúa actualmente en un 35,5%.
Con el objetivo de acabar con estos lastres, el 82% de las empresas españolas afirma estar trabajando en los diferentes ámbitos de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Así, se plasma el compromiso de las compañías españolas con “un plan de acción a favor de las personas, el planeta y la prosperidad, que también tiene la intención de fortalecer la paz universal y el acceso a la justicia”, explica la Organización de Naciones Unidas (ONU).
Un proyecto que tiene como fin acabar con la pobreza en el mundo, terminar con el hambre, que todas las personas puedan acceder a una educación de calidad y a agua potable, entre otros objetivos.
En este sentido, las empresas españolas se han querido sumar a esta iniciativa mundial que establece 17 objetivos con 169 metas distintas. Las empresas españolas se comprometen a trabajar en la contribución de los ODS a escala nacional e internacional. Han empezado a incorporar los ODS en su estrategia empresarial, fomentando modelos de negocio sostenibles e inclusivos.
También han alineado la actividad principal del negocio con los ODS relacionados evaluando la realización de un diagnóstico de impactos en la cadena de valor, integrando una cultura empresarial ligada a los ODS en todas las actividades y operaciones de la empresa. Además, las empresas proponen alianzas por parte del sector privado que puedan materializarse en diferentes fórmulas, como proyectos conjuntos con otras empresas y organizaciones que forman parte de la cadena de valor.
En el terreno práctico, los empresarios españoles han celebrado un foro, el 1 de octubre, en la sede de CEOE al que asistieron 50 representantes de 50 países distintos con el fin de acercar a las compañías españolas los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
“Las empresas son actores indispensables para garantizar el desarrollo sostenible”, explicó Ana Plaza, secretaria general de CEOE, durante el Foro Mundial Empresarial de Objetivos de Desarrollo Sostenible. En este evento, se ha difundido la necesidad de que todas las organizaciones se involucren en la consecución de la Agenda 2030 y en los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
Ana Plaza expresó la “firme voluntad” de las empresas de contribuir a estos 17 ODS y resaltó que esta obligación debe “recaer en todos los actores, aunque las empresas tienen una función crucial para que se logren estos objetivos”. Para que las compañías puedan realizar su labor en la consecución de estos objetivos, la secretaria general de CEOE animó a que se fomenten marcos institucionales y a que se impulsen las alianzas público-privadas y los fondos para movilizar capital y poder cumplir estos retos.
“Estos desafíos suponen un mayor grado de responsabilidad para las empresas, pero no deben suponer nuevas cargas regulatorias que dificulten el desarrollo de su actividad”, añadió Plaza.
A nivel internacional son muchas las asociaciones que ya se han postulado a favor de los ODS. Como es el caso de la OIT, Organización Internacional del Trabajo. Esta entidad señala que “la aprobación del programa de la Agenda 2030 brinda a las Naciones Unidas en su conjunto y a la OIT en particular una gran oportunidad para apoyar a los estados en su compromiso con el cumplimiento de los ambiciosos Objetivos de Desarrollo Sostenible, en los que se cristaliza un amplio consenso sobre una gran variedad de prioridades urgentes e interrelacionadas”.
Este enfoque de oportunidad también lo comparte con la Organización Internacional de Empleadores (OIE), que afirma que “estos desafíos son oportunidades para abrir nuevos mercados y crear nuevas perspectivas comerciales. Tener como objetivo conseguir un entorno empresarial propicio es un gran avance, ya que el desarrollo debe considerarse de manera integrada, por lo que solo las empresas exitosas y sostenibles pueden contribuir al desarrollo y la prosperidad de las naciones y la comunidad mundial”, señala la OIE en un informe.
La función de las empresas es imprescindible para la implementación de los ODS. Así lo señala BusinessEurope, la patronal europea en la que está integrada CEOE, que explica que “las empresas desempeñan una función fundamental en el desarrollo social, como grandes inversores, innovadores, generadores de habilidades y creadores de empleo”.
“Las empresas pueden generar recursos para realizar inversiones en bienestar e infraestructuras clave, como escuelas y hospitales; o como un medio para la integración de jóvenes y migrantes, dando a las personas la oportunidad de desarrollarse y tener un ingreso”, recuerda la organización empresarial europea.
Por ello, BusinessEurope destaca la función “sustancial” de las compañías, ya que competitividad y sostenibilidad no están en oposición. De hecho, existe evidencia de que cuando las empresas de la UE están relativamente avanzadas en este campo, pueden tener un acceso más fácil a la financiación, y esto puede ser una ventaja competitiva para ellas en los mercados internacionales.
Pero no solo es obligación de las empresas implementar los ODS: “La responsabilidad de implementar la Agenda 2030 radica principalmente en los países y sus gobiernos”, señala la OCDE. La colaboración público-privada será la clave para que este proyecto consiga triunfar en 2030.
1. Poner fin a la pobreza en todas sus formas y en todo el mundo.
2. Poner fin al hambre, lograr la seguridad alimentaria y la mejora de la nutrición y promover la agricultura sostenible.
3. Garantizar una vida sana y promover el bienestar de todos a todas las edades.
4. Garantizar una educación inclusiva y equitativa de calidad y promover oportunidades de aprendizaje permanente para todos.
5. Lograr la igualdad de género y empoderar a todas las mujeres y niñas.
6. Garantizar la disponibilidad y la gestión sostenible del agua y el saneamiento para todos.
7. Garantizar el acceso a una energía asequible, fiable, sostenible y moderna para todos.
8. Promover el crecimiento económico sostenido, inclusivo y sostenible, el empleo pleno y productivo y el trabajo decente para todos.
9. Construir infraestructuras resilientes, promover la industrialización inclusiva y sostenible y fomentar la innovación.
10. Reducir la desigualdad en los países y entre ellos.
11. Lograr que las ciudades y los asentamientos humanos sean inclusivos, seguros, resilientes y sostenibles.
12. Garantizar modalidades de consumo y producción sostenibles.
13. Adoptar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos.
14. Conservar y utilizar sosteniblemente los océanos, los mares y los recursos marinos para el desarrollo sostenible.
15. Proteger, restablecer y promover el uso sostenible de los ecosistemas terrestres, gestionar sosteniblemente los bosques, luchar contra la desertificación, detener e invertir la degradación de las tierras y detener la pérdida de biodiversidad.
16. Promover sociedades pacíficas e inclusivas para el desarrollo sostenible, facilitar el acceso a la justicia para todos y construir a todos los niveles instituciones eficaces e inclusivas que rindan cuentas.
17. Fortalecer los medios de implementación y revitalizar la Alianza Mundial para el Desarrollo Sostenible.
Fuente: https://www.elempresario.com